jueves, 15 de agosto de 2019

SE DESMORONA LA PLAZA DE LA SANTA VERACRUZ

 Se desmorona anexo del Museo Nacional de la Estampa.

Este jueves 15 de agosto, José Alfonso Suárez del Real, Secretario de Cultura de la CdMx, anunció que una bodega anexa al Museo, cedió ante la humedad y se desmoronó.

No hubo heridos, pero es necesario reforzar la estructura para resguardar a las torres de una de las tres iglesias más antiguas de la ciudad: la Santa Veracruz, lasnotras dos son la de Tacuba y la Coyoacán.

El edificio del siglo XIX, estaba cerrado luego de los temblores de 1985 y es uno de los muchos que el gobierno, en sus distintos niveles, está restaurando luego de los terremotos de 1985 y 2017.

Esto casi borra un pequeño, bravo y legendario barrio que viví intensamente en los primeros años 70,  cuando trabajé en el Palacio de las Artesanías -hoy Museo Mayer- y compraba tortas en una fonda ubicada en el hoy museo de la Estampa.
 La plaza, hundida en referencia al nivel de la banqueta de la antigua avenida de los Hombres Ilustres -hoy Hidalgo- frente a la Alameda Central, fue la sede de la Archicofradía de la Santa Veracruz (1527) a la que perteneció Hernán Cortés y alberga también a la iglesia de San Juan de Dios, que perteneció al Hospital del mismo nombre -hoy Museo Franz Mayer- uno de los más bellos de la capital del país.
Luego de la noticia dada por Suárez del Real, todas las dependencias relacionadas con Protección Civil y la preservación de nuestro patrimonio cultural, se hicieron presentes.

La plaza es importante por muchas razones, en la iglesia de la Santa Veracruz está la tumba del arquitecto novohispano Manuel Tolsá, y su vecino, el Museo Nacional de la Estampa está sobre el cementerio atrial de la iglesia.

El sitio alberga obra gráfica de Posada, Siqueiros, Rivera, Méndez, Benedetti y Kabakov.
Hace tres semanas visité esta plaza de la CdMx y dos sitios más donde se trabaja para la preservacion de patrimonio afectado por los sismos de septiembre de 2017: la iglesia anexa al ex convento de Santo Domingo, en Tepoztlán, Morelos y la gran plaza de Monte Albán, Oaxaca.
Hay cientos de iglesias, ruinas precortesianas y barrios de ciudades como Juchitán, Oaxaca, afectadas por los movimientos telúricos; no hay dinero, ni especialistas suficientes para restaurar pronto y científicamente lo dañado, pero hay esfuerzos de vecinos, asociaciones civiles, fundaciones nacionales y extranjeras, que colaboran en esta tarea urgente para el país y la culturá del mundo.
Se argumenta que muchas iglesias afectadas por los temblores tuvieron primero sus naves y luego las torres fueron anexadas, que edificios prehispánicos en zonas sísmicas, como Monte Albán, contienen construcciones super puestas y se fracturan con los sismos.
Lo cierto es que conventos rurales construídos entre 1530 y 1600, no han sido afectados por los inumerables temblores en zonas de Hidalgo, Puebla, EdoMex, CdMx, Guerrero, Oaxaca o Michoacán.