ERIC VALDÉS Y BEETHOVEN

 El público le aplaudió de pie al terminar su participación como solista en el concierto inaugural de la temporada primavera-verano 2019 de la Camerata de Coahuila y subió de tono su elogio cuando el jóven Eric Valdés Marines (Saltillo, Coahuila 2002)  finalizó su bellísima interpretación de la Rapsodia Húngara número 6, de Franz Lizst.
Ramón Shade dirigió a la Camerata en la noche del 17 de enero de 2020 con una alegría visible que contagió a los músicos y al público lagunero en el recital dividido en el concierto para piano y orquesta número 5, conocido colo "Emperador" y la Quinta Sinfonía de Ludwig Van Beethoven, en el primero de 14 conciertos dedicados a los 250 años del nacimiento del genio de Bonn.

 Eric es Premio Nacional de la Juventud 2016 y en dos ocasiones Premio Estatal de la Juventud, tiene un intenso programa de conciertos  que en los últimos meses lo han llevado a tocar en Parras, Guerrero y Múzquiz con su proyecto de llevar música de piano a los pueblos mágicos de Coahuila.
El jóven pianista ha interpretado música de Tchaikovsky, Shostakovich, Brahms y Beethoven, ya tocó con la Orquesta Filarmónica del Desierto, de Saltillo y ha sido solista en recitales en Palm Springs y Orange County, California, Houston, Texas y ha sido parte de conciertos especiales como el Piano Recital pre-College Students de The Shepherd School of Music y Kirow Academy Washington D.C. en el Kirov Onternational Music  Festival & Competition.

 Su profesora y consejera actual es la doctora Sohyoung Park, en Rice University, el adolescente ha estudiado piano en la UANL y muy pronto en su carrera ha recorrido la legua con la intención de llevar la música a todos lados y a todos los públicos.
Por ello fundó su #RutaMágicaDelPiano y continúa cumpliendo con una agenda abultada.

Eric Valdés engalanó el primer concierto del 2020 de la Camerata de Coahuila con su calidad interpretativa y su encanto juvenil en el escenario, el público le entregó un premio maravilloso: el más cálido de los aplausos y de pie gritó ¡Bravo!