AGUASCALIENTES CENTRO DE ARTE

Lo primero que hicimos fue visitar la iglesia de San Antonio, obra maestra de Refugio Reyes, una hermosa isla en el centro histórico de Aguascalientes, ciudad sencilla, hospitalaria y muy leal.
Fue impresionante, misa nocturna de domingo rodeada de un ambiente sereno.
Al día siguiente fue descubrir los edificios de art deco en la avenida Madero y calles cercanas. Han tirado muchos, pero lo que queda es muy bello y da un toque cosmopolita a la Ciudad estado.

Aguascalientes tiene un centro histórico lleno de arte, de gente buena y de sorpresas a la vuelta de cada esquina, lo que mas me llamó la atención fue la gran cantidad de obras y de intervenciones del zacatecano que se hizo hidrocalido y le metió mano muchas edificaciones del estado, Refugio Reyes, aquel al que una vez saludaron: adiós arquitecto sin título", y él contestó "Adiós título sin arquitecto".

Una de estas intervenciones es el Museo de Aguascalientes, vecino de la iglesia de San Antonio, que resguarda la hermosa y legendaria obra de Saturnino Herrán; casona neoclasica convertida en museo por intervención de Víctor Sandoval, a quién la capital del estado debe un resurgimiento cultural impresionante en los años 70 y 80 del siglo pasado.
La Madero comienza en el Museo del Ferrocarril donde los nostálgicos esperamos cada día, inútilmente, la llegada del tren que viene desde Ciudad Juárez, va a la CdMx y se detiene una hora en la bella ciudad del centro de México... Y luego de varias cuadras llenas de art deco, termina ante la catedral, para volver a aparecer como calle Carranza y pasar por un lado del bello templo de la Virgen de la Merced, antes de perderse en el Jardín de San Marcos y de saludar de lejos a la Plaza de toros La Monumental.

Para descansar visité la exposición de José Antonio Romero,  "No todos somos Santos", una divetidisima parodia sobre modas y costumbres disfrazada de estudios anatómicos, art nouveau y remembranzas del paisaje de José María Velasco.
Está muestra convive en el Museo de Arte Contemporáneo, con una bellísima exposición del desaparecido pintor hidrocalido Enrique Guzmán.

Y un poco más lejos, el estupendo museo de José Guadalupe Posada, hermano mayor del Museo de Grabado de Saltillo, guarda placas del maestro y su historia, así como del periodismo gráfico de principios del siglo pasado.
Una de sus áreas contiene obra de ganadores del concurso de grabado Posada y ahí está el cuaderno ganador de 2011, es del joven  torreonense Román Eguía.

Descanso agradable antes de volver a la calle para disfrutar de caminatas sin fin , de comida típica donde reina el Chile de Aguascalientes y se respira cultura como elemento de identidad, basta citar al taxista que nos mostró las fotos de la casona donde estuvo la  nevería "Los Alpes", que era de mi familia -dijo- la tiraron para hacer la Plaza de las Jacarandá que a nadie le gusta".
Y ya viene la Reina de las Ferias de México, comienza el próximo día 16 con un homenaje al pintor nacionalista Saturnino Herran.